Muchos jóvenes todavía no se dieron cuenta de una gran realidad, de la cual ninguno de nosotros puede escapar: somos hoy, lo que pensamos ayer y seremos mañana, lo que pensamos hoy. Con mucha frecuencia escuchamos a personas mayores quejándose de la vida, por ejemplo, porque nunca tuvieron condiciones para lograr sus objetivos y realizar sus sueños. Seguramente son personas que alimentaron pensamientos que contribuyeron
a que esto suceda a través de un complejo de inferioridad, pensar que todo es difícil o imposible. O al dar oídos a personas negativas que siempre están buscando a otros para que se adhieran a su grupo de conformistas, diciéndoles: “Por lo menos no somos los únicos que no pudimos”. ¡Pensá unos minutos! Si hoy sos un joven que está yendo por el mismo camino que esas personas, nosotros te queremos ayudar. Hay un proverbio del sabio Salomón que dice así: “Porque cual es su pensamiento en su corazón, tal es él…”, (Proverbios 23:7). Entonces, es ahí que se terminan todos los pensamientos de que la vida de uno depende de la suerte. Nuestra vida depende exclusivamente de nuestros pensamientos. Todo lo que uno hace o ejecuta comienza en su mente. Si vos queres cambiar de vida, empezá cambiando tus pensamientos.
De repente hoy estás viviendo una situación desfavorable, pero si a partir de ahora colocás en tu cabeza, el pensamiento de que vos podés y luchás, todo va a ser posible. Tus sueños se harán realidad. Un día, con tan solo 15 años, cuando estaba comenzando en la FJU en San Pablo, Brasil, puse ese pensamiento adentro mío, el de servir a Dios en el Altar. Determiné que iría por el mundo para ayudar a muchos jóvenes junto a una mujer de Dios con la misma visión. Bueno, el final de la historia, ya todos lo saben. Estamos acá, dispuestos a ayudarte a cambiar tus pensamientos y el rumbo de tu vida.
Pr Fábio.
